CD, 2011
Musikherria
Se acaba el 2011. Lo que para mí ha sido prácticamente un total annus horribilis pasa y espero que toque a su fin definitivo y que las cosas cambien radicalmente a partir de ahora, o de aquí a muy poco. Pero no todo es frustración o depresión. Sin ir muy lejos, musicalmente podríamos decir que la música vasca nos ha dejado muy buenos momentos, como la alegría personal de escuchar el nuevo trabajo de Izate. Willis Drummond nos ha dejado unos grandiosos Istanteak (instantes), que si no se quedan en la retina como las mejores del 2011, estarán entre ellas, y aún tendremos que esperar a que Lisabö tenga a bien permitirnos escuchar ese nuevo disco que han retirado temporalmente de circulación para ser reimpreso y poder deleitarnos con lo que presuponemos será otro glorioso momento (para la edición en vinilo aún tendremos que esperar nada menos que hasta febrero).
Pero hay otros cuantos discos no tan conocidos que, en caso de ser escuchados en lugar de las toneladas de basura que a diario emiten en las radiofórnulas (vascas), recibirían el reconocimiento que se merecen. Entre ellos destacaremos esta vez a la nueva generación que le ha dado un nuevo soplo al rap vasco, entre quienes destacamos bandas como FDLN y, especialmente, 121 Krew y Norte Apache.
Norte Apache tiene poco bagaje discográfico, tres de años nada más, pero tiene un recorrido mayor, pero en este trienio han publicado a razón de disco por año, el primero fue Hesiaren beste aldean (Al otro lado del a alambrada), la sesión en directo de un concierto en 2010 en París (que regalaban al comprarte su camiseta), y el actual Quilombo.
Quilombo es un pedazo de disco sobresaliente. Y punto. Con esta aseveración podría, como diría aquel, cerrar esta reseña y fumarme un puro. Pero es necesario decir algo para atraer a la gente a su escucha.
El álbum posee la perfecta combinación de lo que un disco de rap necesita: una potente y sólida base rítmica, que nos deleita con muy buenos momentos in crescendo, otros más relajados; y unas voces tan bien insertadas como compenetradas que nos deleitan con magníficas letras. Solo le pongo una única pega, y es que siendo dos MCs, la omnipresencia de uno de ellos es incluso exagerada, dejando al otro cantante, no ya en un segundo plano, sino más bien en un sexto. Se agradecería una mayor alternancia entre ambos. Y hasta ahí mi única reticencia.
La letras son brillantes. No encontramos por ninguna parte el discurso prepotente de muchos otros raperos, única y exclusivamente denuncia, “Gurea da geroa” (El futuro es nuestro) es un mensaje en clave positiva para la juventud represaliada y explotada; con la canción “Azal gorriak” (Pieles rojas), trayendo a la memoria el sufrimiento de los pueblos nativos americanos, llaman a la resistencia de los pueblos oprimidos de hoy día (incluyendo nuestros territorios vascos) y es uno de los temas más brillantes, donde la primera colaboración de la bertsolari Miren Amuriza, reivindicando esa no tan lejana conexión entre MCs y bertsolaris, es un punto a favor del tema, cuya melodiosa voz produce un efecto hipnótico que te deja la piel de gallina. “Fenix” podría pasar por el tema más poético. “Eskaera eta eskaintza” (La oferta y la demanda) es otro de los singles del álbum, hasta el punto de tener el honor de ser el tema que abre el exitoso recopilatorio Rap Herria publicado por la radio Info Zazpi Irratia, un grito contra el consumismo. “Alza tu voz”, único tema en castellano, es un mensaje solidario con el pueblo de Nicaragua y otras regiones latinoamericanas, donde hallamos la segunda colaboración de Miren Amuriza. “Ilargi bakarra” (Una única luna) es otro tema relajado, donde la penetrante voz de Aiora, vocalista de Zea Mays entra directa hasta el cerebelo. “Egiaren apologia” (Apología de la verdad) es una canción que comienza a mala ostia, con una de las declaraciones del cacique de Bilbao Iñaki Azkuna contra el demolido Gaztetxe de Kukutza (hace muy poco, este populista demagogo nos deleitaba con otra de sus declaraciones dirigidas a su público: “Me quedo hasta el final. Como el Séptimo de Caballería”. Como parece que a este hombre le van las comparaciones con asesinos colonialistas, yo desde aquí le deseo un destino similar al de los hombre de El Álamo), y en ella nos encontramos unos brillantes ritmos acompañados de la colaboración Endika, uno de los MCs de 121 Krew. “Nire aitaren etxea” (La casa de mi padre) es la única letra que no han compuesto, pues es la adaptación musical del famoso poema del mismo nombre del gran Gabriel Aresti. El disco se cierra con “AHTrik ez!” (No al TAV), el título lo dice todo. Este tema cierra la lista de colaboraciones con otro de los MCs de MAK.
¿Necesitáis aún más razones, después de los explicados y lo que habéis podido escuchar, para prestarle atención a este disco? Bueno, os daré dos razones más: la primera es que con este disco no sentiréis de que os están sacando los cuartos, como puede ocurrir con el disco “Haria” de Berri Txarrak (para quien no conozca el dato, que vaya a una tienda a preguntar por el precio del CD y/o del vinilo de Berri Txarrak), el disco de Norte Apache vale solo cinco euros. ¡¡¡Cinco miserables euros!!!
¿Otra razón? Si aún eres lo suficientemente rata para no soltar cinco euros, vete a su página y descárgatelo gratis: www.norte-apache.blogspot.com
Venga, va, id rápido a hacer caso del último consejo del año, que va a merecer la pena.